Nasa recibe a uruguayos distinguidos por estación espacial

Juan Lacaze. Grupo liceal competirá en EE.UU con 12 ideas por un premio mundial

JUAN LACAZE | PEDRO CLAVIJO para el diario "El País", MVD, UY

Doce adolescentes de Juan Lacaze diseñaron un establecimiento para 17.000 personas que se ubicaría en una órbita de Marte en el año 2070. El proyecto ganó el Desafío Espacial Latinoamericano y competirá a nivel mundial en la Nasa, Texas.

Los jóvenes, que son alumnos de los liceos N° 1 y 2 de Juan Lacaze, tenían que desarrollar, diseñar y describir un establecimiento espacial a construirse "en un futuro".

Los lugares a instalarse podían ser: orbitando la Tierra, en la superficie de la Luna, orbitando Marte o en la superficie marciana. Los factores a tener en cuenta, en tanto, eran: la infraestructura del lugar, la automatización y habitabilidad; así como también factores humanos, sociales y económicos. "Las competencias simulaban concursos licitatorios, en los cuales los contratistas (jueces del certamen) y las distintas compañías (concursantes) presentan sus proyectos para ser contratadas. Por eso se deben tener en cuenta también los costos del establecimiento", explicó a El País Marcela Sanguinetti, una de las impulsoras del grupo que se denominó Juan Lacaze Company.

El proyecto, en tanto, fue llamado Lamaro y asegura que la población humana que viva en el establecimiento tendrá una calidad de vida saludable y segura. Los jóvenes de Juan Lacaze dejaron por el camino proyectos de Argentina, Perú, Brasil y Colombia. En julio su idea concursará en las finales del certamen que tendrá lugar en la Nasa (Texas).

PROCESO. 

Algunos de los estudiantes se enteraron del concurso en 2007, cuando llegaron a Juan Lacaze para contar su experiencia tres jóvenes de un liceo de Maldonado que habían participado en el concurso. Al año siguiente, Claudia Fleury, actual tutora del grupo, reunió a los adolescentes interesados en participar en el próximo certamen con el fin de comenzar a trabajar.

Un año después se presentó otra oportunidad de competir y también en Maldonado se logró el tercer puesto, que resultó un aliciente fuerte. "En ese momento pensamos `no hay dos sin tres`. Nos presentamos, clasificamos a semifinales y ganamos. Desde aquel entonces cambiaron algunos integrantes del grupo pero el trabajo continuó sin pausas y cumplimos el objetivo", aseguró orgulloso Emiliano Herrera.

Las semifinales se realizaron el pasado mes de mayo. En esa oportunidad los chicos tuvieron que presentar una extensión de su proyecto Lamaro, con el que habían logrado la clasificación. "Fue agotador, ocupamos muchas horas, superamos ansiedad, cansancio y estrés, pero llegamos", dijo Gastón Michel y agregó que es de orden "agradecer" a los alumnos de los liceos de Valdense y de Colonia que "trabajaron tenazmente aportando un valor importante al grupo".

La obtención del primer puesto en las semifinales latinoamericanas significa para los chicos un lugar para competir a nivel mundial en la International Space Settlement Design Competition. La competencia será en la NASA, en Texas. Allí los jóvenes tendrán que superar a las 12 compañías ganadoras de las semifinales de todo el mundo.

Los estudiantes de Juan Lacaze están dedicados ahora a financiar sus pasajes y el hospedaje en EE.UU. para poder participar. "Estamos apelando a la colaboración de todos aquellos interesados en el proyecto, y de todos los que consideren importante lo realizado por este grupo de jóvenes. Estamos pidiendo la ayuda de empresas públicas y privadas y de los políticos".

MUNDO CON ESPACIOS VERDES en MARTE

En Lamaro las personas se sustentarían de la comercialización de materiales, la industria y el turismo.

Tiene la misma gravedad que la tierra y está inmersa en una jaula electromagnética que contribuye al desvío de la basura espacial.

Posee diferentes fuentes de energía renovable: solar, geotérmica y cinética.

Sistemas automatizados abarcan la mayor parte de los procesos técnicos, industriales, alimenticios y de servicios.

Robots suplantan el trabajo humano y los habitantes de Lamaro tienen una dieta equilibrada por la variedad de alimentos que se producen en base a cultivos.

Las viviendas son automatizadas por sistemas de domótica, confortables y seguras. Tienen espacios verdes.