Si en algún momento la tendencia la marcaron los
equipos curvos o la resolución 4K, LG presentó ahora cuál podría ser el
objetivo de las próximas series de TV, equipos que no son tan sólo
transparentes sino que además enrollables.
La compañía surcoreana presentó un prototipo de esta
idea, una pantalla OLED que se puede enrollar sin problemas hasta entrar
en un tubo de 3 centímetros de diámetro y que tiene un tamaño, no
menor, de 18 pulgadas.
Esta pantalla cuenta además con una resolución de
1.200 x 810 píxeles y funciona gracias a una capa de poliamida que le
entrega mayor flexibilidad y un grosor más bajo.
Sin embargo, su poder para enrollarse no es lo único
llamativo de este prototipo. Además, estas pantallas sorprenden por ser
transparentes, con el triple de capacidad de transmisión que los
actuales paneles y con una imagen mucho más definida.
Según In-Byung Kang, vicepresidente senior y
responsable del departamento de investigación y desarrollo de LG, este
equipo podría estar disponible para 2017, ya con equipos de al menos 50
pulgadas con resolución UltraHD.
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