Comentarios sobre un artículo publicado por Pilar Besada en el diario "El País", MVD, UY.
Esta semana se cumplen los primeros 5 años del Plan Ceibal. En este artículo se recorren diversas opiniones de personas vinculadas de una u otra forma con el Plan, lo que permite ver en una perspectiva más amplia sus logros y limitaciones, esperanzas y resultados.
Si bien la realidad parece no apoyar la ilusión de Negroponte respecto a "aprender mediante la interacción y exploración independientes" propuesta por el proyecto OLPC, muchos son los que reconocen un avance en la equidad de los recursos educativos disponibles en la educación pública.
A nivel de evolución de resultados a partir de ciertos indicadores, las cifras no han mejorado sustancialmente.
"A 5 años de ese lanzamiento, con 580.000 computadoras distribuidas y un costo de US$ 50 millones anuales, los indicadores de repetición y abandono escolar han variado poco, o han empeorado en algunos casos. En Primaria, la repetición pasó de 7,7% a 6,2% entre 2007 y 2010, y el porcentaje de alumnos con asistencia insuficiente pasó de 7,6 a 7,2% en el mismo período. En tanto, el fracaso de los alumnos cuando pasan de la escuela al liceo se agravó en los últimos años, cuando la repetición en primer año de liceo pasó de 23,7 a 26,6% a nivel nacional y en Montevideo trepó de 38,6 a 42,9% entre 2007 y 2010."
Para algunos, es aún temprano para sacar conclusiones. Para otros, no podemos esperar resultados que no se buscaron. En el debe: mayor y mejor capacitación docente (pedido que se reitera en proyectos similares por todo el mundo), mejores contenidos. La Federación Uruguaya de Magisterio, así como las Asambleas Técnico Docentes han sido críticas al respecto. Otros señalan el alto porcentaje de máquinas rotas, en particular en zonas de contexto desfavorable.
Lo que parece un denominador común, sostenido por los resultados de otros proyectos anteriores y actuales de integración de las TIC en la educación, es que el solo hecho de distribuir gratuitamente máquinas con conexión a internet esperando una cierta "magia" educativa no es suficiente. Como también se ha señalado en repetidas ocasiones, si no hay cambios importantes y profundos en las estructuras de los sistemas educativos los beneficios esperados demorarán en llegar. De todas formas, nadie podrá negar que para muchos alumnos, muchos más de los que pensamos, el Plan Ceibal abrió nuevas puertas a nuevas oportunidades en un tiempo récord.
